
Los investigadores trabajaron con
385 mujeres que estaban siendo tratadas con quimioterapia o terapia hormonal
para combatir el cáncer de mama. Las participantes fueron divididas en tres
grupos diferentes, unas recibieron reflexología con un profesional certificado,
otras tuvieron masajes en los pies para probar el efecto placebo, y el resto se
sometió al tratamiento estándar.
El programa tuvo una duración de
cinco semanas durante las cuales los especialistas pudieron comprobar que las
pacientes sometidas a reflexología sufrían una menor falta de aliento, uno de
los síntomas más frecuentes del cáncer de mama. Además, presentaban más
facilidad para realizar las actividades diarias.
Según el doctor Gwen Wyatt,
especialista a cargo del estudio, la investigación ha demostrado de manera
rigurosa los beneficios de la reflexología y se despunta como un primer paso
para usar esta terapia como complemento a tratamiento contra el cáncer.