
El envejecimiento del cuerpo
lleva consigo un desgaste físico que afecta a los huesos, músculos y otras
partes del cuerpo. La naturopatía, el quiromasaje, la fitoterapia o la
osteopatía son el mejor complemento para restablecer la armonía del cuerpo y
mejorar el estado de salud en la tercera edad.
Los masajes provocan relajación,
liberación de tensiones y equilibrio emocional. Además en las personas mayores
es una forma de realizar ejercicio de forma pasiva, estimular el cuerpo y
favorecer las funciones cardiacas. Por su parte, los productos naturales que
ofrece la fitoterapia pueden aliviar dolencias sin la dosis química de la
medicina tradicional.
Las terapias naturales son un
complemento ideal en el tratamiento de enfermedades propias de las personas
mayores como la artritis, el asma, la bronquitis, los dolores de espalda o la
hipertensión. A través de estas técnicas y llevando una vida sana y activa
puede mejorarse enormemente la calidad de vida durante los últimos años de la
vida.